Un Pesamiento

Mi sueño

Tengo un sueño… donde veo mi colegio como un lugar de excelentes personas, donde los valores impulsados configuran un nuevo joven cristiano, porque los valores están impregnados en toda la comunidad del colegio, desde el portero hasta el rector; es un lugar donde siempre se valora el esfuerzo de las personas, por insignificante que parezca: donde los profesores son estrictos pero fraternos, nos comprenden y acogen; donde la fraternidad se da también de alumno en alumno y de profesor a alumno; un lugar donde la entrada es acogedora, amistosa, armoniosa y amorosa, como toda persona deseara.
Soñé un lugar donde la cultura no era un rasgo de separación, sino más bien una forma de unión entre todos y de esta manera se lograba la unificación de la cultura; un lugar done no se escuchan penas, donde no fluye el rencor por las venas, sino donde se escuchan mas te quiero´s; era un espacio donde el amor le ganaba al dinero y no era éste el que nos clasificaba, como cartas de asar, solo lo interior importaba; no se buscaba escapar de los problemas familiares, sentimentales o personales, con vicios, sino más bien se encontraba una mano en la cual confiar que nos ayudaba a avanzar en un camino cuya luz inspiradora era la Divinidad Suprema, cualquiera sea la forma que esta adopte en este mundo Globalizado, donde las diferencias humanas arrecian y el materialismo prima por sobre la espiritualidad del ser humano; era un lugar donde paso a paso avanzábamos para construir un mundo nuevo, cuyo centro era la paz y la armónica convivencia entre los uno y otros; donde nunca se discriminó por sexo, color e ideología; donde al hombre se le valoraba por su condición de tal y no por su condición sexual.
Era un ambiente donde no solo se respiraba oxigeno, sino también una sana libertad, para poder expresarnos con respeto reciproco, era agradable, éramos felices, se respiraba fundamentalmente Amor. Y entonces recordé a Jesucristo que dijo “Yo les he dicho todas estas cosas, para que participen de mi alegría y sean plenamente felices. Ahora les doy mi mandamiento: Ámense unos con otros como yo los amo a ustedes”.( San Juan, 15:11-12).

Sebastian Zenteno G.

14 Años

Santiago,Chile